El supervisor europeo de seguros ha publicado las directrices para la supervisión de productos y sistemas de gobierno (POG, en inglés). Estas guías tendrán que cumplirlas tanto aquellos que diseñan los productos como quienes los venden. El objetivo es ayudar a los reguladores de cada país a aplicar esta normativa y que se alinee con la Directiva de Distribución (IDD) que en estos momentos se está transponiendo.

El presidente de Eiopa, Gabriel Bernardino, considera que estas recomendaciones minimizan los riesgos para el consumidor y la venta abusiva de productos de seguros. Matiza también que los reguladores tienen que comprobar que las soluciones aseguradoras tienen en cuenta las necesidades de los consumidores y que se están vendiendo a los clientes adecuados.

La propuesta del regulador también tendrá que aclarar, por parte del fabricante de los productos, quiénes son los consumidores objetivos del producto en cuestión y qué canales son los más apropiados.