Unespa critica que el Gobierno castigue el ahorro finalista por afán recaudatorio

Pilar González de Frutos, presidenta de Unespa, criticó ayer en las Jornadas de Perspectivas de ICEA, la medida del Gobierno de incorporar al salario a efectos de cotizaciones la previsión complementaria y los seguros de Salud: “El Gobierno por un afán recaudatorio castiga el ahorro real, el finalista, el ahorro para la jubilación, al tener que cotizar y a la vez subir un 5% las bases, es decir un doble castigo. ¿Pero no hemos quedado en que hay que fomentar la previsión social complementaria para que nuestros abuelos de mañana tengan capacidad de consumo y puedan mantener su nivel de vida? Se castiga al ahorrador en un mensaje claramente desincentivador justo cuando el Pacto de Toledo tiene que estudiar el informe sobre impulso de esta previsión elaborado el Gobierno”.

Añadió que “se castiga también a las personas que, por diferentes razones, deciden dedicar un esfuerzo adicional a proteger su salud y, teniendo derecho, porque lo pagan, a ir a su ambulatorio, pagan una protección aseguradora y ayudan por tanto al equilibrio de la sanidad pública. Estos trabajadores, que han pactado con sus empresas una cobertura colectiva, también son castigados. Dicho de otra manera: antes en España decíamos que la sanidad era de doble pago: la pública y privada. Pues ahora si eres trabajador y de rentas medias o bajas, resulta que la sanidad en España es de triple pago, porque pagas vía impuestos, pagas tu seguro colectivo a través de tu empresa y pagas una tercera vez con un incremento en tus cotizaciones sociales”.

Unespa considera esta situación “terriblemente injusta, porque no se puede castigar al que se preocupa de su futuro o de mejorar su bienestar”, por ello,  González de Frutos enviará una carta a todos los responsables políticos advirtiéndoles de que “tienen entre sus manos condenar a las futuras generaciones de jubilados a ser básicamente más pobres que el resto de los europeos, porque si les condenamos a una sola renta, que es la pensión pública y que además todos sabemos, y quien diga que no miente, que no podrá crecer sustancialmente los próximos años, estamos decidiendo hoy que nuestros jubilados de mañana vivan pobremente. Es el momento de impulsar de verdad formulas de previsión complementarias similares a las que tienen la mayoría de los europeos. En esa carta, se dirá a los responsables políticos que, aunque aquí la partida se juega cada 4 años, las decisiones que tomen hoy van a ser responsabilidad suya para siempre, porque son ellos hoy, en los próximos meses, los que pueden decidir qué será de todos nosotros el día de mañana y las ideologías para esto no sirven, porque defender una pensión pública de 3.000 euros para cada jubilado está bien, yo me apunto porque además me voy acercando, pero todos sabemos que eso no se puede pagar. Es el momento de parar, pensar y poner a trabajar el ahorro para ir construyendo un escenario futuro de bienestar en el que la pensión pública, sea la que sea, deje de ser el monocultivo de renta de los españoles”.

Sobre el impacto que la medida del Gobierno pueda tener en el negocio asegurador, la presidenta de Unespa, señaló que “hemos estimado lo que nos costará en nuestro Convenio Colectivo, que incluye
muchas de estas prestaciones y mejoradas, y es importante. Creo que la previsión complementaria ya constituida no tendrá reducciones, porque la mayor parte procede de negociación colectiva y mientras no se renueven los Convenios no se puede cambiar, pero lo que no hará es favorecer que los nuevos Convenios que se firmen incorporen estas prestaciones, es decir, a corto plazo no nos afectará, pero limitará nuestro crecimiento futuro. En Salud, pasará igual. Su crecimiento de los últimos años ha venido de colectivos, que se mantendrán en los Convenios vigentes, pero que difícilmente estarán en los nuevos si se encarecen un 30%”.