Unespa pide aumentar el límite de aportaciones a los PIAS para los ciudadanos mayores de 50 años

La presidenta de Unespa, Pilar González de Frutos, ha presentado la propuesta fiscal del sector asegurador para el ahorro a largo plazo y la previsión social complementaria de cara a la reforma que está preparando el Gobierno. La propuesta parte de la idea general de que la neutralidad fiscal para todos los instrumentos de ahorro que se propugna desde la anterior reforma del IRPF y que defiende también el propio Informe de la Comisión de Expertos perjudica el ahorro a largo plazo y debilita el papel como inversores institucionales de las aseguradoras y las gestoras de Planes de Pensiones porque a igual tratamiento los ahorradores siempre van a optar por la inversión a corto plazo: “La entidad aseguradora no puede conceder ninguna retribución adicional que la de los activos en los que invierte, por lo que la compensación tiene que derivar del tratamiento fiscal”.

Seguros de Ahorro a largo plazo

Entre las propuestas relacionadas con los seguros de Ahorro a largo plazo, Unespa defiende que se fomenten fiscalmente los productos que den ahorro estable, como las rentas vitalicias y los PIAS. Respecto a estos últimos seguros de Vida destinados a constituir un ahorro sistemático pide, ya que la Seguridad Social va a empezar a informar de su pensión esperada futura a los trabajadores mayores de 50 años, que se aumente el límite de aportación anual para este colectivo, límite que ahora es de 8.000 euros; y consecuentemente también se propone eliminar el límite máximo de aportación global establecido en 240.000 euros.

En relación a este grupo de seguros de Ahorro a largo plazo también se solicita al Gobierno que en las rentas vitalicias aseguradas se establezca una exención de los rendimientos del capital mobiliario o de las ganancias patrimoniales que se pongan de manifiesto con ocasión de la transmisión del patrimonio mobiliario o inmobiliario, siempre y cuando el importe obtenido se destine a la constitución de una renta vitalicia asegurada. Para beneficiarse de este incentivo fiscal, la renta vitalicia mensual a percibir por el contribuyente no podría superar determinados límites.

Sistemas de previsión social

Respecto a los sistemas de previsión social: Planes de Pensiones, PPA y Planes de Previsión Social Empresarial (PPSE), se propone un tratamiento fiscal de las prestaciones en el que los rendimientos tributen como rentas del ahorro (al tipo fijo del 19% o 21%), tributando únicamente como renta del trabajo la parte que se corresponde con la devolución de las aportaciones. En este caso lo que se busca con las propuestas es favorecer el cobro de las prestaciones en forma de renta vitalicia para lo que se propone también una reducción del 40% de la parte de la prestación que se corresponde con la devolución de aportaciones si toda la prestación o una parte significativa de la misma se cobra en forma de renta vitalicia.

Otro de los objetivos es incentivar el desarrollo de la previsión social complementaria entre las Pymes. En este caso lo que se pide al Gobierno es que estas pequeñas y medianas empresas puedan hacer aportaciones por cuenta de sus empleados a Planes de Pensiones individuales o PPA sin necesidad de promover un Plan de Pensiones de Empleo o formalizar un PPSE.

Pilar González de Frutos ha admitido que todavía no tienen una respuesta del Ejecutivo a estas propuestas, “pero sí hemos escuchado valoraciones positivas sobre las necesidades de ahorro hechas por miembros del Gobierno”. Y advierte que “el problema de la falta de ahorro vinculado a la jubilación va ser para la economía española, no para el seguro”.