Grupo Aseguranza

Mapfre firmó ayer con la representación legal de los trabajadores el plan que empezará a ejecutarse a partir del 11 de mayo de manera progresiva y que se traducirá en un "plan de retorno progresivo a la normalidad", según menciona la compañía. Este plan, para el caso de los 10.000 empleados de la compañía en España, se extenderá hasta el mes de septiembre, aunque la duración dependerá de la evolución de la pandemia y también las condiciones que se vayan determinando, según alerta.

La realidad es que en España se optará de "forma prioritaria la modalidad de trabajo en remoto a lo largo de esta fase". Esta decisión será más cuidada para los trabajadores especialmente vulnerables al Covid-19, a las empleadas embarazadas o con riesgo durante el embarazo y los empleados que tengan hijos inferiores a 16 años o con niños con situaciones especiales.

Progresiva reincorporación

Más allá de España y dentro del mismo plan de vuelta a la normalidad, Mapfre resalta que esta reincorporación "pondrá el foco en la seguridad de los empleados".

La nueva fase que ha activado la aseguradora en la que parte de los empleados regresarán a las instalaciones en las próximas semanas y meses, mientras que el resto seguirá operando en remoto. Resalta la entidad que esto supondrá que la mayor parte de los empleados seguirá desarrollando sus funciones en modalidad de teletrabajo. El regreso a los puestos presenciales se ajustará a las circunstancias de cada país y se llevará a cabo de manera escalonada. La duración de este plan estará determinado por las autoridades de cada lugar.

Mapfre instalará una serie de medidas de prevención y profilaxis destinadas a "reforzar seguridad de todos los empleados en sus puestos de trabajo". Esto incluirá un protocolo sanitario en el que se evaluará la situación de cada empleado con respecto a la enfermedad y que se aplicará previamente a la incorporación del trabajador a las instalaciones.