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El RACC ha participado en el desarrollo de un navegador con precisión a nivel de carril que funciona con el nuevo sistema europeo de navegación por satélite Galileo. El sistema ha sido diseñado durante los últimos dos años y medio por el consorcio inLane, del que forma parte el RACC junto a otras empresas e instituciones europeas (como TomTom, Honda, Intel o Vicomtech), y ha sido financiado por la GSA, la agencia de sistemas de navegación por satélite de la Comisión Europea.

Es una nueva tecnología que detecta en qué carril se encuentra el vehículo y, en consecuencia, ofrece indicaciones más precisas y claras al conductor sobre en qué carril debe situarse. Este sistema permite planificar y anticipar las decisiones al volante y, por lo tanto, mejora la seguridad vial evitando los cambios de carril en el último momento. Igualmente, cuando se disponga de información del tráfico a nivel de carril, permitirá evitar los carriles con más congestión. "Muchos accidentes son provocados por decisiones de última hora que, con este sistema, podrían evitarse y así salvar vidas", subraya Martí Massot, jefe de Estudios de Movilidad del RACC.