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El Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social publicó ayer por la tarde una guía sobre el registro de jornada laboral. El fin del mismo, según indicó el Gobierno, es "facilitar la aplicación práctica de la norma, en el que se recogen criterios, a mero título informativo, en relación con este deber formar empresarial, sin perjuicio de la interpretación de la norma que corresponde a los juzgados y tribunales de orden social".

El texto está dividido en 4 apartados según los tipos de preguntas: ámbito de aplicación, contenido y sistema de registro, conservación y acceso al registro y registro de horas extraordinarias.

En el primer apartado se deja claro que la normativa se aplica a la totalidad de los trabajadores, "al margen de su categoría o grupo profesional, a todos los sectores de actividad y a todas las empresas, cualquiera que sea su tamaño u organización del trabajo", siempre que estén incluidas en el ámbito de aplicación que se define en el primer artículo del Estatuto de los Trabajadores (ET).

Como en todo hay excepciones y la norma deja fuera de este control al personal de alta dirección, pero no a los mandos intermedios, cargos de confianza o con ejercicio de especiales responsabilidades. Tampoco tendrán que 'fichar' los socios trabajadores de cooperativas, trabajadores autónomos y aquellas relaciones o prestaciones de trabajo excluidas del ámbito de aplicación del ET.

La guía deja claro que las empresas quedan obligadas al registro diario de jornada también respecto de trabajadores 'móviles', comerciales, temporales, trabajadores a distancia o "cualesquiera otras situaciones en las que la prestación laboral no se desenvuelve, total o parcialmente, en el centro de trabajo de la empresa".

"Nadie lo toma en serio"

La ministra del ramo, Magdalena Valerio, cuestionó ayer la seriedad con la que las empresas se estaban tomando esta medida: "Nadie se ha tomado en serio la entrada en vigor del registro de la jornada laboral", dijo. Y en consecuencia señaló que "la Inspección de Trabajo va a actuar".

Trabajo ha detectado que en las empresas españolas se están haciendo más de 3 millones de horas "que no se cobran ni se cotiza por ellas".