Desde 2013, el ramo de Decesos ha ido marcando unos resultados de la cuenta técnica realmente significativos. De hecho, el negocio puede presumir de conseguir permanentemente uno de los resultados más altos que se obtienen en el sector asegurador y siempre por encima del resto de los ramos de No Vida. El pandémico ejercicio 2020 fue la excepción, pero el ramo ha sabido aprovechar la crisis que originó el Covid-19 para coger aún más impulso y, desde entonces, está anotando unos resultados que no se vieron ni en 2013 ni en 2014, cuando mejor iban las cosas. Pero lo más destacable es que, según una encuesta, la mayoría de las aseguradoras que operan en este negocio estiman que aún no se ha tocado techo y pronostican que el resultado seguirá al alza en 2024.