Una de las novedades más destacadas que introduce la transposición de la directiva de distribución (IDD) al mercado español a través de la Ley de Distribución es la obligación del corredor de establecer cuentas separadas. La norma, convalidada ayer en el Congreso de los Diputados, indica que el mediador de seguros "deberá acreditar que los fondos pertenecientes a clientes son transferidos a través de cuentas de clientes completamente separadas del resto de recursos económicos del mediador".

E2K reunió ayer a la prensa para explicar sus opiniones discordantes acerca de este punto que se articula a través del 136.4 de la ley. Uno de ellos, y casi el principal, es que no cumple con el fin propuesto por Europa. La obligación de contar con cuentas separadas ha disparado las consultas en la entidad prestadora de servicios a la mediación hasta el punto de ser "prácticamente la única" en los últimos tiempos.