Grupo Aseguranza

El sector asegurador sigue en plena revolución y algunas compañías –todas ellas estadounidenses, de momento– ya han dado un paso al frente para comercializar únicamente pólizas interactivas. Una de ellas es John Hancock, una de las mayores aseguradoras de EEUU, que 'obliga' a los asegurados (ya en cartera o nuevos) a conectar sus dispositivos wearables a una plataforma informática, donde tendrán que volcar  sus datos relacionados con la salud y la actividad física. Hasta la fecha, sólo lo hacían los clientes adheridos a su Plan Vitality, un programa que fomenta la vida saludable y premia a los usuarios –con regalos y descuentos en la prima– en función de su estado de forma. Pero, desde este año 2019, quien no forme parte de este Plan Vitality, no podrá contratar una póliza con esta aseguradora.

Esta decisión ha levantado una gran polvareda entre las asociaciones de consumidores y usuarios, denunciando que una aseguradora no puede 'obligar' a los clientes a que faciliten información tan personal. Pero, ¿hasta qué punto obliga John Hancock a sus asegurados?

En la revista Aseguranza hemos preguntado a varias entidades sobre la incorporación de esta tecnología y qué sucederá con el actual proceso de selección de riesgos.

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